Abro los ojos, miro. Comienzo a caminar, sintiendo mis pies. Mientras respiro me invade el aire sucio. Escucho que me llaman, doy media vuelta y me dicen: Estamos a tiempo. Ignoro el mensaje, sigo caminando. El mismo aire sucio sigue invadiendo, abro un caramelo y tiro el envoltorio en el suelo. Llego a casa y la computadora sigue prendida, como de costumbre. Abro la canilla y me sirvo un vaso de agua, pero lo tiro porque tiene gusto raro. Hace un mes que el plomero no viene a arreglar la cañería y todas las canillas pierden, lo ignoro, solo es agua cayendo. Prendo la TV, en todos los canales informan que hay una alerta ecológica, lo ignoro. Golpean la puerta, abro y veo a un niño que me dice: ¡Ya es demasiado tarde!
Los Hippies una cultura diferente...
Hace 15 años